Fue a quiebra un pool de compras de insumos para el agro que no caminó

Hace diez años no sorprendía ver entre los productores agropecuarios del extremo sur santafesino sociedades anónimas ligadas a la explotación rural que en realidad se habían constituído como pooles de siembra para negociar buenos precios entre grandes demandantes de insumos. Así fue como nació Siembras y Servicios SA, una firma con domicilio en Venado Tuerto y comandada por históricos propietarios de tierras productivas en el departamento General López que ahora entró en quiebra.

La sociedad en cuestión en realidad atravesaba un concurso preventivo de acreedores a través del cual podía mantenerse operativa siempre y cuando cumpliese con un acuerdo de pago a sus acreedores. Lo cierto es que por resolución del juez de Primera Instancia en lo Civil, Comercial y Laboral de Melincué, Alejandro Lanata, se conoció que en junio la SA ingresó en el régimen de quiebra indirecta derivada del fracaso de la convocatoria de acreedores.

Con domicilio en calle 12 de Octubre 1795 de Venado Tuerto, la compañía supo estar presidida por el empresario rural Alfredo Cafferata con campo en el sur provincial y su esposa Ximena Columbres. Ambos regentean la estancia “Las Bayas” de María Teresa. De acuerdo a información que pudo verificar Punto biz, la lógica de Siembras y Servicios SA era la de recibir capital de muchos productores y negociar con proveedores de peso cotizaciones acordes con las compras en cantidad.

Lo cierto es que el negocio comenzó a empastarse cuando los armadores del pool empezaron a acordar con proveedores específicos en perjuicio de ofertas de otros fabricantes haciendo menos transparente la operación para los participantes.

La sociedad anónima pasó luego a dedicarse al negocio de siembra enfrentando un pasivo que se hizo difícil de manejar. En Venado Tuerto indican que Siembras y Servicios, tras desarrollar la figura del pool de compras, llegó a mover grandes sumas de dinero de inversores agropecuarios en una estrategia que en un momento eclosionó por desaciertos de los gerenciadores que no tuvieron otro recurso que caer en concurso preventivo que ahora devino en quiebra indirecta.