Finalmente Adecoagro pudo vender La Lacteo, con planta central en Córdoba. Y según pudo averiguar punto biz, quienes se quedaron finalmente con la firma fueron Lucio Bonaldi – titular de la cordobesa Templac – y Raúl Filippi – ex gerente de La Lácteo y de Sancor –. Entre ambos se dividieron las acciones en partes iguales y tienen su titularidad desde el primero de agosto.
Si bien se trata de dos empresarios muy ligados al negocio, la incógnita pasa ahora por saber cómo financiarán la empresa ya que Adecoagro se la quería sacar de encima por el fuerte costo financiero que le estaba insumiendo mantenerla, además de necesarias inversiones en equipo y en el desafío de sumar productividad en el plantel laboral.
Por un lado, Lucio Bonaldi, dueño de la cordobesa Templac SA – con planta en Santiago Temple y que explota la marca Windy – es quien a título personal y desligado de la industria que dirige se hizo cargo de la mitad de las acciones. Hace dos años atrás, el empresario había sido uno de los promotores en la provincia mediterránea del programa del Gobierno Nacional “Lácteos para Todos” que impulsó Guillermo Moreno.
Y por otro lado, Raúl Filippi, ex gerente general de Sancor entre 1981 y 2002, y de La Lácteo de 2007 a 2012 – se quedó con el otro 50% de la firma para la cual trabajó hasta el año pasado. Actualmente, el ex directivo es consultor en industrias lácteas y un conocedor de los vericuetos del sector.
Es más, cuando la venta de la cordobesa comenzó a sonar fuerte y todos los cañones le apuntaban a la santafesina Gonella como el principal inversor, el nombre de Filippi también giraba en el movida porque se lo vinculaba como el mayor asesor del sueño de La Ramada por conocer a fondo la firma y ser, además, hombre de confianza del empresario esperancino.
Adecoagro ingresó a La Lácteo después de que el gobierno le bloqueara la compra de Sancor. El grupo que supo tener como impulsor al magnate húngaro George Soros, se había quedado con campos en Venado Tuerto con las intenciones de sembrar maíz para, además de la producción de etanol, usar como alimento para el ganado del mega tambo montado en el sur santafesino. La idea, en sus inicios, era industrializar la leche en Sancor.
Con la negativa del gobierno, el grupo empresario salió a buscar reemplazante hasta toparse con La Lácteo – la cual había estado ligada años atrás a Franco Macri –. Y luego de comprar la industria cordobesa, hasta llegaron a analizar la idea de levantar una planta para la producción de leche en polvo y proteínas lácteas.
Sin embargo, el proyecto nunca se hizo realidad y la empresa comenzó a generar millonarias pérdidas – en el sector hay quienes sostienen que el rojo era de $3 M mensuales –. A partir de ese entonces, Adeco le puso cartel de venta a la cordobesa.
A final es de 2012, el grupo se había quedado sin socio cuando la canadiense Agripur – dueña del otro 50 % de La Lácteo - puso en venta sus activos en Argentina.
