La industria plástica rosarina que se anota para fabricar la copa menstrual

Caplast, instalada en el Polígono Ovidio Lagos, se autopostuló para fabricar la copa menstrual, un recipiente ahuecado de silicona, que se adhiere a las paredes vaginales adaptándose a cualquier movimiento y acumulando el flujo en su interior y que, a través de un proyecto que ya ingresó al Concejo, se busca que sea distribuido gratuitamente en dispensarios y centros de salud local.

“Hemos prestado mucha atención al anteproyecto de ordenanza a tratarse próximamente en el Concejo referido a la difusión en la utilización y entrega de copas menstruales, con enormes beneficios en salud, economía familiar, y cuidado del Medio Ambiente. Humildemente le hacemos saber que nuestra empresa cumple con todas las condiciones y normativas para la producción de las piezas medicinales”, comunicó la empresa a través de una carta que le hizo llegar a la intendenta Mónica Fein y otros funcionarios.

“No solo por nuestro historial productivo sino por nuestro plantel de máquinas y equipos de última tecnología internacional que han sido certificados por la Municipalidad, con Nivel 2 de buenas prácticas ambientales y reconocimiento provincial de Línea Verde”, sumó y aclaró que la firma también tiene las certificaciones de Anmat necesarias, “dado que estamos certificados por Inti con las ISO 5 para la inyección de caravanas y demás elementos de uso veterinario”.

“Hemos tomado contacto directo con Alemania, país de origen productor de la materia prima utilizada en la fabricación de Copas menstruales aprobada por la Unión Europea y las normas de América del Norte, desde donde nos brindarán el apoyo tecnológico correspondiente”, agregaron desde Caplast.

La empresa asegura que puede fabricar el dispositivo “con costos mínimos” y que no necesitará apoyo financiero de ningún tipo aunque si concretar una “real alianza estratégica público-privada”. De esta forma, el proyecto de la Copa Menstrual se diferencia de lo que ocurrió hace algunos años cuando la firma fue convocada por el municipio para fabricar dispositivos médicos pero no hubo acuerdo dada la compleja inversión inicial que se requería.

“Este nuevo proyecto a ser tratado en el Concejo es totalmente viable, de baja inversión inicial, de muy bajo costo de pieza producida, y de enormes beneficios en salud, y en el cuidado del medio ambiente”, cerró la compañía.