De agente de viajes de la farándula local a ser acusado por estafa millonaria

Hasta hace muy pocos días, Luis Rodolfo Lucho Paladini tenía sus redes sociales abiertas y allí volcaba comentarios, imágenes y videos que lo hacían ver como un hombre de mundo, de buen nivel social y muy vinculado con la farándula rosarina, con quienes se seguía mutuamente e incluso intercambiaba historias muy a menudo.

Tras ser denunciado por estafa por casi un centenar de personas que se quedaron sin sus viajes -que ya habían pagado- toda esa exposición se borró de repente y ninguno de sus perfiles públicos siguieron en pie. De hecho, su nombre ahora está en todos los medios producto de una denuncia judicial en su contra que presentaron los damnificados.

Paladini decía ser primo de Nicolás Paladini, reconocido empresario de la ciudad que el año pasado saltó a la fama nacional por participar del programa Bailando por un Sueño, aunque el propio hombre de negocios lo negó en su perfil de Twitter: “A todos mis contactos, conocidos y amigos: Por este medio hago saber que no me une ninguna relación de índole familiar, comercial o social con Luis Paladini @LuchoPaladini Hago extensivo esto a los integrantes de mi familia. Teníamos una amistad. Ya no y tampoco somos familiares. Y está perjudicando a mucha gente”, posteó.

Pero detrás de un caso de estafa hay una historia un poco más complicada que involucraría una adicción al juego que empezó por dificultarle su relación laboral con la empresa de turismo Ticket Center -de la cual fue despedido el año pasado- y lo terminó llevando a la tapa de los principales medios de la ciudad.

Luego de desvincularse laboralmente de la mencionada empresa, Paladini había intentando formalizar su condición de agente de viajes poniendo online una página web propia. Sin embargo, ese portal hoy también pasó al olvido. 

Paladini se hizo un nombre como agente de viajes, ya que según cuentan viejos clientes, tenía un trato personalizado en el armado de los itinerarios y ofrecía precios más baratos que los del mercado. Periodistas, empresarios de la movida nocturna y emprendedores, formaban parte del círculo social en el que se movía.