El nuevo desarrollo premium sobre la barranca en Alberdi

Cuando parecía que el foco de la inversión inmobiliaria había virado hacia el sector de clase media, un grupo empresario local decidió apostar a un nuevo proyecto de envergadura en la ciudad. Se trata de Barranca del Buen Aire, un complejo privado de edificios bajos que se levanta sobre la barranca frente a la costanera norte y que tiene entre sus principales inversores al empresario Daniel Marrochi, tal como había adelantado el año pasado punto biz.

Con una novedosa tipología de bloques bajos que se van extendiendo aprovechando la inclinación natural de la barranca, se levantan allí 129 unidades, desde monoambientes hasta departamentos de 4 ambientes, todas con vista al río y con amenities premium. Además, se prevén también 140 cocheras cubiertas ya que cada módulo edilicio contará con estacionamiento para vehículos.

Así, Barranca del Buen Aire se presenta como un condominio cerrado de 129 unidades con amenities premium emplazado bajo una arboleda centenaria, en un predio de 2 hectáreas privilegiadas de la zona de Alberdi.

“Vivir en Barranca del Buen Aire es disfrutar no sólo de una arquitectura premium en la mejor barranca del norte de la ciudad, también es disfrutar de una añosa arboleda emplazada en todos los espacios verdes comunes del condominio, que sin dudas son uno de los rasgos distintivos de este desarrollo inmobiliario. Pinos, cedros, álamos y otras especies arbóreas configuran un entorno único, invitando a disfrutar del aire libre sin salir de casa”, promocionan.

La seguridad del predio está garantizada, ya que se encuentra entre medianeras, con un único ingreso vehicular y vigilancia las 24 hs.

En cuanto a las unidades, los monoambientes son de unos 30 metros cuadrados cubiertos, mientras que de tres ambientes hay dos tipologías, una de 90 m2 cubiertos más 12 semicubiertos, y otros que rondan los 115 metros cuadrados entre cubiertos y semicubiertos, más 42 metros cuadrados de jardín. Respecto a los de cuatro ambientes, también hay dos tipologías, ambas rondan los 130 m2 de superficie cubierta y 30 semicubierta.

Dentro del predio, hay una antigua casona con un siglo de historia que con el desarrollo se convierte en un club house que ofrece amenities de calidad premium para todos los residentes, como pileta climatizada, salón de usos múltiples, gimnasio y anfiteatro. La restauración del edificio respeta los rasgos de la arquitectura original, revalorizando la estructura y destacando todos y cada uno de los detalles que la distinguen.