Fanática de la moda no esperó una vida para tener su propia marca

Lis Maria Forni soñaba de niña con tener su propia marca de ropa. Y no esperó un vida para concretarlo: a los 23 años esta joven emprendedora de Rosario tiene su firma de indumentaria con la que vende no sólo en la ciudad sino que ya tiene hasta alcance nacional. 

“Siempre supe que me gustaba la moda, veía desfiles, dibujaba, jugaba a combinar prendas de mis hermanas mas grandes, y yo sólo tenía 14 años. Sentía que era lo mio”, confiesa. Así fue que hace dos años comenzó a desarrollar su emprendimiento. “Al terminar el colegio ya estaba decidida a estudiar diseño de moda, era lo que más me apasionaba, no me veía haciendo otra cosa que no fuera eso”, recuerda y confiesa que recibió no pocas críticas de su entorno por no haber elegido una carrera más convencional y por lanzarse a un proyecto personal sin antes trabajar en algún lugar bajo relación de dependencia. “Sin embargo nunca deje que el ruido ajeno me confunda y no me desvié del camino que quería seguir”, asegura.

La marca, bautizada Di Cruz, en un principio se lanzó con muy poca producción, algo de 15 prendas que eran entregadas en consignación a algunos locales comerciales. “Donde yo solía comprar mis prendas dejaba las que había hecho. Y veía que la ropa gustaba, que se vendía, y así fue como adquirí confianza en lo que hacia, con mucho esfuerzo”, recuerda sobre los comienzos.

Pero de a poco la producción y comercialización fue ganando volumen. Ahora no solo vende a los locales muy conocidos del centro  como Taj Mahal, Ganesha, Amada Inmortal, Matisse, Maria Donatta, sino que también la marca llega a diferentes puntos del país por encomienda como Mendoza, Salta, Tucumán y Bahía Blanca. En paralelo, también tiene abierto el canal mayorista vía facebook

Di Cruz, es una marca que apunta chicas jovenes pero también tiene líneas para mujeres modernas. Por un lado ofrece prendas relajadas, como remeras, vestidos, enteritos, tops, calzas estampadas, pantalones floreados y blazer, caracterizadas por la mezcla de texturas y una amplia gama de colores. Y por otro lado una línea de guardarropa más elegante y formal para aquellas chicas que deseen vestirse para fiestas o eventos.

Consultada sobre cómo se mantiene en un segmento de alta competencia, señala que su fórmula no pasa por resignar precio o calidad sino por atraer con renovaciones constantes las líneas acercando lo ultimo en moda y diseño. “La marca me gusta un montón”, insiste como una clave para diferenciarse.

 
“Recientemente terminé los estudios en Técnico superior en Marketing. Y creo que es fundamental estudiar y capacitarse para estas cosas, la competencia en el mercado hoy es muchísima y hay que estar preparada para eso”,  resaltó.